Friday, September 20, 2013

A la Vega



Aurora centelleante, las ruedas de madera
Crujientes en la escarcha sus clavos oxidados
Bajo el sombrero marrón como el camino
encandila la mañana nueva

El morral del cerro
amontona tres generaciones
entreveradas de mariposas  y tabacos

Bajo el sombrero marrón
un sueño atrasado pinta nostalgias
al trote cancino del amigo bayo

La plaza del mercado
con luces de mercurio
prepara su regateo de pilastras

Una garra de anillos impone el precio
y bajo el sombrero marrón
muerde su rabia el parcelero

Pero, luego, un café caliente
y un sánguche de pernil
lo mejoran todo

En el retorno, liviano de lastres,
el trote del caballo es ligero
ya el sol entibia la mañana

Hasta la pieza de barro
con su fogón al medio
la mujer que espera

un beso es recompensa
para cebar un mate
y chamullar un sueño.

Buenos Aires,  1975.

La huella ploma


Los días lunes cubren
sus pies de gabardinas negras
y tropecé en un ascensor extraño
llevando al décimo piso de la quimera
mi ansiedad de zarzamoras

El hedor a pólvora se  vino conmigo
Un trozo de greda se descascaró
sobre el viento sur
Un rojo intenso cubrió
la huella obrera de los asfaltos

Las linotipias quedaron sometidas
a huesuda funebrera
de abolengo mercenario

Las murallas acribilladas
se tragaron en sus adobes
las esquirlas del espanto

En la flaca historia
la pezuña dejó su huella ploma


Buenos Aires, 21 de abril de 1976

Economía en micro

Todas las mañanas
y en frecuencia modulada
un fulano nos dice
que ha subido la u-efe

Todas las mañanas
Y en frecuencia modulada
se me hace patente
que el producto decrece


Todas las mañanas
por mis horas perdidas
creciendo desmentida
va doña cesantía

Todas las mañanas, en frecuencia modulada
o en colores muy nítidos
me descubro más solo
con mis orientales equipos


Poema escrito en medio de la Crisis de 1982

Wednesday, September 18, 2013

Recital de Poesía Erótica en SECAL. Agosto 2013


"Agresiva en su indudable belleza, usando con displicencia y relajo esa piel canela encandilante, usted transgredió intencionadamente los límites y me dejó sintonizado a las fantasías que vino sembrando, cimbreante y lúdica por mi vereda, dejando esa estela inocente e incendiaria, que me ha hecho olvidar mis cabildeos sobre el big bang o las especulaciones sobre los destinos de Wall Street, anulando mi concentración necesaria,  destapando aromas del Caribe, en la liviana cobertura del algodón blanco ajustado a sus piernas, empinadas en esos tacones, rojos como el fuego de sus ojos almendrados.

Incitación a la lujuria que ha trastornado mi mesura y que me obliga a representarle mi profunda molestia por su belleza, desbocada como gacela sobre mis frágiles convicciones..."

Fragmento de  Incitación a la Lujuria, del libro Cable a Tierra, 2010.

Monday, September 16, 2013

Septiembre

Abre, septiembre
tu pecho en ventolera
Sostén con tus cometas
la organza flameante de la cueca.

Déjame percibirte, amigo,
con umbrales serenos
esperando la voluntad ruidosa
de rotos y mineros


Déjame arrebozarme, viejo,
Se ha hecho largo el invierno,
esperando el remanso
de un dieciocho fraterno


“Septiembre” Poema del libro “Memorias Poéticas y Licencias para un Reinicio”, Umbral Editores, 1993.

Sunday, September 15, 2013

Nuestros Mártires


La muerte plastificó ya su rutina
Su  carné se hizo ruleta
Hagan juego, caballeros
Negro el once, ocho muertos
Diecinueve requeridos
Ocho por dos, noventiséis
Cero de conciencia
Gana la casa…

Así brotan nuestros mártires
Anónimos, redentores
Comulgando en la llama inquisidora

No nos dejan
ni memorizar sus nombres,
borran mínimos las murallas de homenaje.

Nuestros muertos, acumulados  en silencio
No nos dejan despedirlos
Nos arrebatan sus cuerpos
Falsifican sus lápidas
Se infiltran en las procesiones
Espían nuestros responsos
Eligen allí mismo nuevas víctimas

¡Cómo crece la fosa común del humanismo¡

Por el pentagrama plomo de su guerra
Circulamos “los enemigos”, armados de paciencia
Con harapos de miedo,  desnudándonos
Asombrándonos, pese a todo
Uniendo fuerzas
contra este sacristán de la mentira
Aunque nos bloquean
hasta el penúltimo camino
cada día es más grande el cortejo

Y los sepultureros preguntan
Por qué cantamos el himno de la alegría

Así, rodeados de pretorianos
Despedimos nuestros muertos
Sabiendo que habrá otros
Que no alcanzaremos
Ni a memorizar sus nombres
Pero crecerán las murallas de homenaje
El miedo hinchará la vejiga del verdugo
No soportará mucho más tal desatino

Este canto creciente de “los enemigos”
Que en incomprensible ronda
Veneran sus muertos

No va más, caballeros
No va más


Del libro “Memorias Poéticas y Licencias para un Reinicio”, Poema “Nuestros Mártires”, escrito el 11 de julio de 1986.


Tuesday, September 10, 2013

Pregunta, mi niña

PREGUNTA, MI NIÑA

Saltas
Con tus alas fantásticas
todo el día
Eres sonrisa
puente, campana

Me llevas a tu selva de intelecto
Me sorprendes con tu penúltima consulta
Sin dejar que te conteste, vuelas con otra

Escabulles, saltas, mariposa delgada
Tejiendo tus alas en colores geométricos
Bordas, brincas y escabulles

Emerges sorpresiva de tus libros de cuentos
Disfrutas el polen de tus días
y hoy te enamoraste,  sonrojada

Delgada noviecilla de árbol navideño
Preciosa princesita que ríe porque ama

Tu sueño deambula y brinca
todo el día
vital y enmarañado
Disfrutando ser libre

Hasta que me preguntas
“¿Qué es libertad, papá?”

Y me sorprendes.



Del libro “Miedo al Miedo, Poemática para abrir nuestras ventanas”, 1987.